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Descripción del producto
La filosofía de Charro Coils es ofrecer unas resistencias de gran rendimiento, apostando por un sabor inmejorable. Las resistencias CharroCoils, se centran en ofrecer una calada instantánea, para ello utilizan los materiales idóneos para cada modelo, equilibrando la masa de las resistencias, para que en ningún caso se estrese la batería al vapear.
La gran novedad de estas resistencias no es ni el material, ni los hilos utilizados, sino algo más sencillo, más “normal” pero que marca una diferencia abismal: Nos presentan las primeras coils en el mercado fabricadas sobre guía calibrada de 2.25mm de diámetro. Muchos podréis pensar, pero 0.25 no es mucha diferencia… Y tenéis razón, no es mucha diferencia sobre el molde de 2.25mm pero es la diferencia suficiente como para que cambie por completo la experiencia de vapeo, la reactividad y lo táctiles que va a volver vuestros pulsadores, ya que tienen una respuesta instantánea. Por otro lado, estas resistencias solventan el problema que habían encontrado al utilizar resistencias de 2.00mm de diámetro y es que prácticamente no le cabe nada de algodón. A estas resistencias les entra el suficiente algodón para proporcionar un buen drenaje. Pack de 2 unidades.
Además para el montaje no hay ningún problema pues la guía de 2.0 mm aunque baila un poco, se puede emplear perfectamente para que no se deforme al instalarla en vuestro atomizador favorito.
Perfectas para todo el espectro de atomizadores dual coil, ya sean RTA, RDA o RDTA de más de 22mm.
Consejos de instalación:
Cuando desempaquetes una resistencia CharroCoils, colócala en una guía del diámetro indicado, introduce las patas de la misma en el hueco del deck del atomizador indicado para ello (siempre una pata en el polo positivo y otra en el polo negativo) y corta el sobrante. Una vez ajustada la longitud de las patas, vuelve a colocar la resistencia en su sitio y aprieta los tornillos que la van a sujetar al deck. Una vez instalada asegúrate de que no toca la resistencia con ninguno de los polos, salvo con sus patas.
Cuando las tengas instaladas, procederemos a estabilizarlas. Este proceso se tiene que llevar a cabo en un dispositivo electrónico, nunca en un mod mecánico. Para comenzar a estabilizar las resistencias, seleccionar en el dispositivo electrónico un voltaje de salida de potencia bajo, alrededor de 1,8V. Poco a poco iremos dando pulsaciones cortas hasta que veamos que la resistencia va cogiendo temperatura. Sin llegar nunca a poner la resistencia completamente incandescente, iremos atisbando, una serie de puntos que se iluminan más que el resto de la resistencia. Para eliminar esos puntos y que la resistencia quede correctamente estabilizada, iremos apretando las vueltas de la resistencia con unas pinzas cerámicas, de manera suave y pausada hasta que se hayan eliminado por completo. Una vez que no hay puntos rojos y la resistencia enciende de manera uniforme desde el centro hacia los extremos, estamos listos para empezar a utilizarla; solo faltaría ponerle el algodón, nuestro líquido favorito y estaría listo.
Limpieza:
Cuando veamos que la resistencia está sucia o que el algodón ha perdido algunas de sus propiedades, retiraremos el algodón, una vez hecho, repetiremos el proceso de estabilización de las resistencias, pero de manera mucho más suave, nunca poniéndolas al rojo vivo. Las calentaremos de forma tranquila y antes de que se pongan incandescentes las sumergiremos en un vaso de agua para templarlas y que se produzca una limpieza en la resistencia por pirolisis. Repetiremos este proceso dos o tres veces en cada limpieza, hasta que queden perfectamente limpias y podamos volver a poner los algodones y seguir vapeando.
